¿Es hora de darle un toque especial a tu maquillaje?

La vida sería mucho más fácil si tuviéramos suficiente tiempo al día para hacer todo sin esfuerzo. Nuestras vidas no son tan fáciles y, aunque internet nos hace creer que tenemos las mismas horas que Beyoncé, muchos seguimos yendo con retraso y a menudo sin energía. Si bien la idea de "despertar impecables" es un mantra de amor propio que podemos apoyar, nos aplicamos retinol, mascarillas y cremas de noche como medida de precaución.

Estamos ocupadas. Nuestras agendas están repletas de obligaciones laborales o académicas, con escasos ratos libres para recados y citas. Necesitamos que el esfuerzo que dedicamos a nuestra rutina de belleza dé sus frutos al final del día, en lugar de que se esfume y se pierda. ¿Existe algún tipo de belleza que pueda seguir el ritmo de una mujer emprendedora y ajetreada?

No podemos permitirnos que nuestro maquillaje nos falle. Y si lo hace, tampoco podemos arreglarlo. Eso nos supone más trabajo y menos tiempo para ocuparnos de lo que de verdad importa. ¿Cómo podemos lucir radiantes cuando nuestro maquillaje no funciona? La pregunta es: ¿tu maquillaje se adapta a tu estilo de vida o es hora de cambiar de base?

Tu maquillaje necesita modernizarse. Debería trabajar tan duro como tú. Es cierto, sabemos lo que queremos de la vida, incluso de nuestras relaciones, mucho más de lo que queremos de nuestro maquillaje. Es parte de conocernos a nosotras mismas. Nos hemos acomodado, tenemos miedo de probar cosas nuevas, rebuscando en el cajón de labiales hasta encontrar un viejo favorito, aunque ya no nos guste como antes.

Deberíamos comprar maquillaje como si buscáramos a nuestro próximo empleado: ¿tiene proyección en el sector? ¿Compartimos los mismos valores? ¿Es versátil? ¿Se integra bien con los demás? ¿Está dispuesto a trabajar hasta tarde si es necesario? Deberíamos dedicar más tiempo a leer las etiquetas y consultar referencias en línea.

A veces, ser jefa implica tomar decisiones difíciles. Y a veces, implica renunciar al maquillaje que no te favorece. Es hora de despedirte del maquillaje que no te sienta bien. Tu piel te lo agradecerá.